Que interesante es el articulo que Felix Socorro publica en Gestipolis.
Felix coincide en muchas de las apreciaciones de la Gacela, en cuanto la mayor parte de los empleados consideran que sus jefes no realizan su trabajo adecuadamente, no reunen los minimos requisitos o directamente, se les considera ineptos. Estas opiniones alcanzan el 80% de los preguntados y se da en todos los sectores empresariales y en todos los tipos de empresas: grandes o pequeñas, publicas o privadas, de servicios o productivas....
Felix, en su estudio analiza alguna de las razones por las que existen gerentes ineptos:
- Se les valora porque son personas con una relación longeva en la empresa: El tiempo de permanencia en un mismo cargo hace suponer que lo manejan y conocen a plenitud y más aún si la operación fluye sin errores importantes o los mismos no son del conocimiento de los superiores.
- No se les evalúa con objetividad porque están relacionados con el dueño o personas influyentes de la empresa: Son parientes, allegados o amigos de alguna persona de peso en la organización, recomendados y vendidos como “buenos profesionales” o son individuos a quienes se le deben favores o existe alguna deuda “moral”, sentimental, política o de cualquier otra índole que obliga a mantenerlos en esos cargos. Usualmente ostentan algún tipo de experiencia que supone la asimilación de las operaciones por contraste.
- Se les considera importante porque son personas con títulos y reconocimientos de envergadura: Poseen, en teoría, todo lo que se requiere para manejar una operación con éxito, sus logros académicos los anteceden y por lo tanto se da por descontada la experiencia. A veces esta situación tan sólo se presume, pues no hay evidencia de la titulación.
- Se pierde la oportunidad de cuestionarlos porque son individuos con una importante habilidad de palabra: Su increíble capacidad para convencer a la audiencia en situaciones de dudas o conflictos y el apropiado manejo de la información, aun cuando ni ellos mismos la comprendan, hace suponer un nivel de involucramiento propio de los gerentes aptos.
- Su superior es tanto o más inepto que él: Cuando el desconocimiento de la operación, el negocio o cualquier elemento práctico o teórico está ausente en los niveles de reporte es mucho más difícil identificar la existencia de la ineptitud pues no existen fundamentos para oponerse a los planteamientos o acciones que se presenten.
Otro punto muy importante es ¿Cómo identificar a los gerentes ineptos?. Esta es la repuesta:
- Confunden la acción de gerenciar con la de gobernar: Un gerente capaz se involucra en la operación y busca la manera de facilitar el proceso haciendo uso del trabajo en equipo, en cambio el gerente inepto sólo exige soluciones desde su despacho estableciendo tiempos y especificando el contenido de los resultados sin tener la más mínima idea de lo que pide.
- Siempre se muestran ocupados y carentes de tiempo: Un buen gerente organiza y administra el tiempo, establece prioridades y sabe que no todo es urgente. Comprende y valora las necesidades de su equipo y está consciente de la curva del agotamiento mental y físico del personal y de la propia. Para un gerente inepto se requieren días de treinta y seis horas, todo es urgente y “para ayer”, le coloca a todos los procesos el mismo sentido de prioridad y se justifica señalando que “así es la empresa”, exige el triple de esfuerzo a su personal, los obliga a trabajar sin reparar en el tiempo, pero cuando tiene un compromiso fuera del ambiente laboral no duda en retirarse.
- Se muestran seguros ante su personal pero nerviosos ante sus supervisores: Un gerente apto conoce a detalle su operación y es capaz de defender sus alegatos y posiciones con explicaciones sólidas e irrefutables. En cambio, un gerente inepto grita y vocifera ante sus subordinados, haciendo uso del poder que le confiere la posición pero duda, vacila o calla ante el cuestionamiento que le realice cualquier superior.
- No delegan funciones, dependen de su gente: Los buenos gerentes conocen la operación, por lo tanto, ante una situación inesperada, son capaces de tomar las riendas de cualquier parte del proceso para que éste no se detenga. Los gerentes ineptos se dedican a justifican la ausencia de buenos resultados en situaciones donde el personal que ha asignado para una tarea en particular no asiste a sus labores. No sabe cómo mantener el flujo del proceso y depende de su personal para que el mismo se mantenga.
- Sufren del “Síndrome de Anát”: Los buenos gerentes se preocupan por buscar soluciones ingeniosas a los problemas de su área, están abiertos a escuchar a su personal y reconocen públicamente la autoría de los aportes que estos hagan a su gestión. Un gerente inepto vende las ideas que su personal le ha sugerido como suyas. En algunos casos piden que les envíen la propuesta o el desarrollo de un trabajo en formato electrónico y, tras algunas pequeñas modificaciones, las presentan a sus superiores como si fuera el resultado de su esfuerzo.
- Son aduladores, serviles y exhibicionistas con sus jefes: Un gerente apto no necesita promocionarse dentro de la empresa, la calidad de sus resultados y el buen ambiente que produce su gestión son elementos suficientemente importantes para ser valorado y considerado por quienes lo supervisan. Pero en el caso de los gerentes ineptos no ocurre lo mismo, siempre andan haciendo eco de lo que realizan, resaltando sólo aquello que considera valioso ante los ojos de sus jefes, a quienes atiende y complace de una manera servil y poco ética, sin importar la imagen que se forjen ante sus subordinados. Frente a sus superiores se muestran incansables y dedicados, manifestando que si no fuera por su “estilo gerencial” la operación no sería un éxito, obviando por completo el esfuerzo de su equipo de trabajo.
- Sufren del “Síndrome de Cronos”: Un gerente capaz buscará la manera de hacer crecer a su gente, en cambio un gerente inepto siempre estará en la búsqueda de limitaciones para evitar que su personal lo alcance.
- Para ellos siempre hay una crisis: Los buenos gerentes buscan el equilibrio entre la empresa y su personal, saben que sólo así se logran cosechar buenos frutos. Los gerentes ineptos, de manera constante y repetitiva, dicen a su personal que las cosas van de mal en peor y por lo tanto han de aceptar las condiciones que él les imponga en el ambiente laboral, pues de lo contrario estarían arriesgando sus empleos. Para ellos siempre hay una crisis que requiere de atención y cuidado, siendo ellos los únicos capaces en sortearla.
- Es necio y obstinado: Un gerente apto maneja el estrés y la inteligencia emocional, escucha recomendaciones y promueve la creatividad y la innovación, en tanto que un gerente inepto constantemente se muestra estresado y malhumorado, se empeña en que las cosas deben hacerse como él lo dice y especifica el más mínimo de los detalles, aún cuando lo que desea expresar no se vea reflejado en sus demandas. Suele emplear expresiones tales como “trate de no ser creativo”.
¿Habéis identificado a alguno?. Y, en el caso de que seais gerentes, habéis visto alguna vez esos comportamientos en colegas o en vosotros mismos?
Si podéis echarle un ojo al articulo completo. Merece la pena!!
Referencia: GERENTES INEPTOS: ¿RECONOCE A ALGUNO EN SU EMPRESA?